Si no conoces la vacumterapia, este artículo te puede ser de gran utilidad…
La vacumterapia es una terapia que usa el efecto del vacío en todo el cuerpo induciendo una mejora de la microcirculación de los tejidos, una acción antiinflamatoria y desintoxicante con numerosos beneficios…
¿Qué es la vacumterapia?
La vacumterapia consiste en aplicar sobre la piel un efecto de vacío, creando una cámara de aire en la que se practica una depresión y sucesivamente una compresión para solicitar la circulación venosa y linfática.
Con este efecto ventosa, con depresión y compresión, se consigue un mayor flujo de sangre en la zona, estimulando la circulación y la oxigenación, acelerando el intercambio de sustancias, mayor flujo de oxígeno y nutrientes y una mayor retirada de catabolitos y sustancias de desecho.

¿Cómo se realiza la vacumterapia?
Es una técnica mecánica que actúa por succión a nivel hipodérmico mediante unos cabezales específicamente diseñados, ventosas o campanas, que deslizamos sobre las áreas corporales o faciales.
Se realiza un “masaje vacum” o “masaje negativo”, ya que, a diferencia del masaje convencional, ejerce la presión de dentro hacia fuera, induciendo un movimiento de deslizamiento sobre la piel.

Con ello conseguimos una liberación del tejido miofascial, produciendo una movilidad del tejido conjuntivo, descongestionando los territorios endurecidos e hipersensitivos.

Se consigue a su vez un drenaje linfático y una defragmentación del tejido adiposos para posteriormente ser eliminado por vía linfática o en orina.
Por ello, se utiliza tanto para tratamientos terapéuticos como para tratamientos estéticos.

Beneficios de la vacumterapia
El desarrollo de este tratamiento se realiza por medio de una succión controlada, la cual produce diversos efectos fisiológicos entre los cuales se encuentran:
- Aumento de la irrigación sanguínea por vasodilatación, aumento del flujo sanguíneo y nutrición muscular. En los tejidos periféricos se verifica entonces un sustancial aumento de los niveles de oxígeno y una disminución del anhídrido carbónico: mejorando el flujo sanguíneo se facilita la actividad de intercambio que se cumple en los capilares acelerando el flujo sanguíneo, se contrasta también estasis venosa que hay en la base de las venas varicosas y de la relativa insuficiencia venosa.
- Acción analgésica. Esto se consigue a través de la mejora del flujo sanguíneo local, produciendo así la llegada de nutrientes, oxígeno, y la retirada de productos de desecho. Todo esto tendrá un efecto desintoxicante y depurativo sobre el organismo. Además, produce una liberación miofascial, mejorando el deslizamiento intertisular (entre los distintos tejidos del organismo).
- Elongación sobre las fibras conectivas de la piel que se encuentran retraídas.
- Estimulación de los fibroblastos para la producción de colágeno y elastina.
- Distensión de las estructuras vasculares.
- Movilización de grasa subcutánea.
- Cuando sus manipulaciones se hacen siguiendo las vías linfáticas, realizando un buen drenaje linfático, básico para la buena evolución de cualquier tratamiento anticelulítico, linfedemas, retención de líquidos…

En definitiva, la Vacumterapia nos proporciona numerosos beneficios siempre y cuando sea aplicada por un profesional, pues debemos conocer la anatomía y fisiología humana para que no haya ninguna consecuencia negativa tras el tratamiento.
En Clínica Atlas disponemos de tecnología Vacumterapia, y podemos asesorarte si lo necesitas, consúltanos y estaremos encantadas de resolver tus dudas.