Existe evidencia científica sobre los beneficios del ejercicio físico. En los últimos años se viene demostrando que las personas mayores son uno de los grupos de población que más beneficios obtienen con la actividad física, tanto desde el punto de vista terapéutico como preventivo.
A través del ejercicio, la persona tiene una poderosa herramienta para mejorar su salud. El efecto de realizar ejercicio físico de forma regular es prácticamente inmediato.
En la tercera edad se deben estimular todos los movimientos implicados en la realización de las actividades de la vida diaria, tales como sentarse y levantarse, subir y bajar escaleras, colocar objetos a diferetnes alturas, caminar, etc…
La práctica regular del ejercicio físico se asocia a una disminución de la mortalidad global y a un aumento de la esperanza de vida en más de 2 años sobre la media poblacional (Myers et al 2002).
Algunos conceptos importantes que debes conocer son:
- Actividad física: se refiere a cualquier movimiento corporal realizado por los músculos esqueléticos que produce gasto de energía.
- Ejercicio físico: es aquella actividad física planificada, estructurada y repetitiva, que tiene como objetivo la mejora o mantenimiento de la forma física.
- Forma física: consiste en una serie de atributos que las personas tienen o adquieren y que están relacionadas con la capacidad de realizar trabajo físico. En una adecuada forma física intervienen varios factores:
- Resistencia cardiorespiratoria.
- Fuerza muscular.
- Resistencia muscular.
- Composición corporal.
- Flexibilidad.
- Sedentarismo: es la falta de actividad física, quemar menos de 500 Kcal/Semana.
La edad produce cambios, pero algunos de estos cambios están más relacionados con la falta de actividad física que con el envejecimiento en sí. ¿Sabías que el ejercicio físico…
- Reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares hasta en un 50%.
- Reduce el riesgo de padecer diabetes de tipo II en un 50%.
- Contribuye a prevenir y a reducir la hipertensión.
- Contribuye a prevenir y a reducir la osteoporosis, reduciendo así el riesgo de fractura de cadera en la mujer hasta en un 50%.
- Ayuda a controlar el peso y disminuye el riesgo de obesidad en un 50% en comparación con las personas con modos de vida sedentarios.
- Reduce el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer.
- Reduce el riesgo de caídas, contribuye a mejorar la función cognitiva y a combatir el aislamiento social y la depresión.
- Mejora nuestro sistema respiratorio
La calidad de vida de las personas mayores que hacen ejercicio es mucho mayor, con lo que se reduce la necesidad de tomar medicamentos y el riesgo de dependencia, fomentando un envejecimiento saludable.
El ejercicio físico es la mejor medida preventiva contra la parición de los síntomas invalidantes que se presentan en la vejez, generalmente en el aparato locomotor y que son debidos a alteraciones degenerativas o estáticas consecuentes al proceso biológico del envejecimiento.
En resumen, podemos decir que el ejercicio físico incide sobres tres áreas de nuestro organismo: aparato locomotor, impidiendo la atrofia muscular y favoreciendo la movilidad articular, sistema cardiorrespiratorio, aumentando la capacidad cardiocirculatoria y respiratoria, con lo que se incrementa el riego sanguíneo en todos los órganos, la oxigenación de la sangre y el metabolismo y el área psicointelectual favoreciendo la actividad intelectual y el equilibrio afectivo.
Al programar el tipo de ejercicios de las personas mayores se han de tener siempre en cuenta la aptitud física y el entrenamiento, para determinar la intensidad y el tiempo de desarrollo. El programa deberá ser variado, incluyendo siempre ejercicios respiratorios y de relajación.
Y recuerda, el movimiento te ayuda….